Keltie Ferris +++c+o+n+t+a+c+t+++

Morán Morán is pleased to announce Keltie Ferris’ second exhibition with the gallery and the artist’s first in Mexico City. Titled ﹢﹢﹢c﹢o﹢n﹢t﹢a﹢c﹢t﹢﹢﹢, this exhibition presents seven new paintings that are of two different series, including a site-specific wall drawing. Four vibrant paintings compositionally break from a heavy-knit grid, and the other three, as well as the wall drawing, make use of delicately flowing line work rendered over a blank expanse. Coming from dissimilar directions, these two series exemplify Ferris’ ability to adeptly shift within his own practice from one method of expression to another.

With the grid-based abstractions, the artist interrupts a geometrical system by employing various shapes and marks that loosely reference blooming flowers or explosions of light. Through a palette that seems to include the spectrum in its most potent hues, these works toy with balancing excess and restraint alongside exaggerating the tension between organic and orderly forms. The figure/ground complications that arise from Ferris’ color combinations and layering of various paint applications (sprayed and brushed) are an achievement in illusion as the eye searches for visual hierarchy. There is a performance borne by this technique, and the compositional trope of leaving the center of the image empty, further insists on the illusion because it brings our attention to the frame.

Sharing a more obvious lane with performance, the line-work paintings are ethereal yet undeniably physical. Here, Ferris allows the hand to be very direct and we witness the aftereffect of pastel pigments moving with speed over a white gessoed canvas. These intuitive and quick images feel like a pure translation of the fluidity inherent within the natural world, of grasses in wind, spirogyra in water. His colorful threads dance with an unchoreographed ease, becoming even more spectral because he returns to his formalized process of erasure by making rhythmic swipes across the lines. This process lends another conversation to the figure/ground relationship and the resulting blur creates its own abstract phenomenon.

Responding to the unique architecture of the gallery space, Ferris executed a wall-drawing that thematically converses with the canvases. With this ephemeral gesture, the artist articulates the physicality and spontaneous essence of the line works. The cohesion of this exhibition lies in the artist’s effort toward experimentation – images confirmed through the act of repetition and how gaps between gestures are not so much negative space but rather moments of potential connection.

Morán Morán se complace en anunciar la segunda exposición de Keltie Ferris con la galería y la primera del artista en la Ciudad de México. Titulada ﹢﹢﹢c﹢o﹢n﹢t﹢a﹢c﹢t﹢﹢﹢, ésta exposición presenta siete nuevas pinturas que pertenecen a dos series diferentes, además de un dibujo mural de sitio específico. Cuatro dinámicas pinturas se desmarcan por su composición reticulada mientras las otras tres, así como el dibujo mural, recurren a un trabajo de líneas que fluyen delicadamente sobre una extensión en blanco. Procedentes de direcciones distintas, estas dos series ejemplifican la capacidad de Ferris para cambiar hábilmente dentro de su propia práctica de un método de expresión a otro.

Con las abstracciones cuadriculadas, el artista interrumpe un sistema geométrico con el uso de diversas formas y marcas que sutilmente hacen referencia a flores o explosiones de luz. A través de una paleta que parece incluir el espectro en sus tonos más potentes, estas obras juegan con el equilibrio entre el exceso y la contención, exagerando la tensión entre formas orgánicas y ordenadas. Las complejidades figura/fondo que surgen de las combinaciones de color de Ferris, así como de la superposición de varias aplicaciones de pintura (aerosol y pincelada), logran ilusionar al ojo en su búsqueda de jerarquía visual. Esta técnica conlleva un juego performativo, y el tropo compositivo de dejar vacío el centro de la imagen insiste aún más en la ilusión, ya que dirige nuestra atención hacia el marco.

Compartiendo un vínculo todavía más evidente con el performance, las pinturas lineales son etéreas pero innegablemente físicas. Aquí, Ferris permite que la mano sea muy directa y somos testigos del efecto de los pigmentos de pastel moviéndose con velocidad sobre el lienzo blanco de gesso. Estas imágenes intuitivas y fugaces parecen una depurada traducción de la fluidez inherente al mundo natural, tanto hierbas en el viento, tanto spirogyras en el agua. Sus hilos de colores danzan con una facilidad no orquestada, dotando de cualidades espectrales gracias al regreso del artista a su proceso formal de borrado, realizando rítmicos deslizamientos sobre las líneas. Este último confiere otra conversación a la relación figura/fondo, y el resultante efecto difuminado crea su propio fenómeno abstracto.

En consonancia con la singular arquitectura de la galería, Ferris realizó un dibujo mural que dialoga temáticamente con los lienzos. Con este gesto efímero, el artista articula la fisicalidad y la esencia espontánea de los trazos de las obras. La cohesión de esta exposición radica en el esfuerzo de experimentación del artista: imágenes afirmadas a través del acto de repetición, y en la manera en que los huecos entre los gestos no son tanto espacios negativos sino potenciales momentos de conexión.